Bebe agua e hidrata tu piel

A todos nos gusta lucir una piel sana, limpia e hidratada, pero son muchos los factores que hacen que nuestra piel no esté impecable, como el estrés, el cansancio, el sol o el dormir mal.
El agua es la pieza clave para piel. Es imprescindible para mantener el equilibrio y la función de la barrera protectora. Además el nivel de hidratación facial no es constante y se ve afectado por factores como el viento, la fatiga y los medicamentos. Cuando la piel está deshidratada, la epidermis sufre la falta de agua volviéndola tirante, rugosa y en ocasiones escamosa.
 
Pautas para la correcta hidratación 
 
– Para desintoxicar la piel para recibir todos los beneficios de la hidratación has de beber cada mañana media taza de agua con limón, de esta manera tu cuerpo expulsará las impurezas que se hayan acumulado durante la noche.
 
– Bebe al menos 2 litros de agua al día.
 
– Duerme al menos 8 horas al día para que tu piel no se resiente y luzca radiante.
 
– Exfolia tu piel una vez a la semana y usa cremas hidratantes.
 
– No te olvides de añadir a tu alimentación cuantas frutas y verduras frescas puedas, son ricas en agua, sales minerales y vitaminas.