Cata de agua

Para poder realizar una cata de agua se deben tener conocimientos sobre el ciclo del agua y la relación que existe entre el sabor del agua mineral y el terreno del que sale, ya que la vegetación que pueda haber en la parte superior es responsable del gusto y aroma del agua.
 
Según el ciclo del agua, esta puede ser:
 
Agua mineral natural: que sale del manantial de forma natural. Con sus propias características minerales y biológicas (color, olor, sabor, turbidez o sedimentación).
 
Agua de manantial: es igual que el agua mineral natural pero con menor riqueza mineral.
 
Agua potable: su procedencia puede ser variada, pero ha tenido que ser tratada para obtener una estabilidad bacteriológica.
 
Como en la gran mayoría de catas, la cata del agua se desarrollará en tres fases:
 
La fase visual, donde se podrá ver si el agua es transparente o brillante.
La fase olfativa, donde se diferenciará si el agua es agradable o terrosa.
La fase gustativa, se distinguirá si el agua es de gusto alcalina o dura, dulce, ácida o salada, agradable o terrosa.
 
Si el agua contiene gas se valorará su finura, la persistencia y la cantidad de gas carbónico.